Pedro Alexis Navarro Rojas nació el 26 de febrero de 1950 en Los Robles, estado Nueva Esparta, hijo del comerciante y agricultor Pedro Simón Navarro Ávila y la maestra de corte y costura Francis Caracida Rojas Ferrer. Es el segundo hijo de una familia de cuatro varones. Su infancia transcurre entre juegos y aventuras, siendo su entretenimiento favorito la natación. Sus primeros estudios se inician en el año de 1955 en la escuela federal Víctor Cedeño ubicada en su pueblo natal de Los Robles, donde conoce a Rafael Rosa, con quien establece una entrañable amistad. Sus estudios de bachillerato los realiza en el Liceo Francisco Antonio Rízquez. Ávido lector de novelas, durante su adolescencia, devora una por una, novelas tan universales como El Quijote de la Mancha, Los Tres Mosqueteros y Doña Bárbara, entre otras, despertando entre novelas y libros una vocación por el periodismo, carrera ésta que no llega a estudiar, ya que por capricho del destino, acudió a Caracas acompañando a unos amigos a presentar la prueba de medicina, resultando el único admitido entre sus compañeros de travesía. Comienza de esta manera la aventura de estudiar medicina en 1968 en la ciudad de Zaragoza, en España, donde fue hospedado por su hermano. Durante dos años cursa con éxito la carrera, obteniendo buenas calificaciones; sin embargo, la mala fortuna se hace presente en su vida y en 1970 sufre un accidente, que le impide continuar sus estudios en tierras ibéricas.

Regresa a su patria, donde continúa sus estudios de medicina en la Escuela «Luis Razetti» de la Universidad Central de Venezuela (UCV). Hoy en día guarda gratos recuerdos de sus profesores tales como José Pérez Guevara, Pedro Armas, Ernesto Figueroa, Hernán Paublini y Félix Pifano, los cuales con su ilustre ejemplo, le motivaron a realizar posteriormente sus estudios de Epidemiología e Infectología. En el año de 1973 es interno del Hospital de Los Magallanes y posteriormente del Hospital de Lídice. En 1975 se gradúa de médico, y ejerce en 1976 como médico rural en Cumaná durante dos años y medio. En esta ciudad además de dar sus primeros pasos en el ejercicio de la medicina, conoce a su esposa, la señora Yuraima Ortiz, con quien compartió su vida por más de 26 años. Tienen un hijo varón quien es el orgullo de sus padres.

En 1978 inicia la residencia en enfermedades infecciosas y parasitarias por dos años, y posteriormente continúa sus estudios en Medicina Tropical. Desde el año 1980 y 1982 realiza estudios de Salud Pública en Nueva Orleans (EUA). A su regreso inicia su senda de trabajos de investigación sobre infecciones hospitalarias, publicado en el Boletín del Hospital Universitario de Caracas (HUC). Ingresa en el año de 1992 en la Cátedra de Medicina Tropical, Facultad de Medicina de la UCVcomo docente de pregrado, y simultáneamente como docente del postgrado de Pediatría Infecciosa en el HUC. Sin embargo decide inmediatamente dedicarse a la enseñanza a nivel de pregrado, donde para sorpresa de él mismo se siente más a gusto al encontrar una mayor motivación en este grupo de estudiantes por el estudio de las enfermedades infecciosas.

Pedro Navarro fue un fiel creyente de la doctrina, de que la enseñanza se basa en una estrecha relación profesor-alumno, y que ésta se basa en la confianza mutua, donde el docente juega un rol fundamental en motivar el estudio el cual debe ser un acto agradable y no un deber riguroso, donde el profesor esterotipado amonesta verbalmente al alumno terminando por desmotivarlo, y lo que logra es que estudie por pasar. Según sus palabras «El colmo de un docente es cuando un exalumno cambia de ruta para no saludarlo«, lo cual según su opinión nace del hecho de que «Las materias no son difíciles sino que es el profesor el que la hace difícil«.

De sus tantos trabajos realizados encontramos cinco libros que tratan sobre enfermedades infecciosas, los cuales son: diarrea (premiado en 1993), meningitis, infecciones virales, parasitarias e infecciones del sistema nervioso central. Ha realizado más de sesenta publicaciones, referidas a diversas patologías infecciosas. Pedro Navarro es un hombre cuya ideología de la enseñanza es radical. Él piensa que el humanismo de la medicina viene del interior de la persona que ejerce la profesión, siendo mejor médico aquel con compasión, y no el que porta elegantemente su bata, ser médico es tratar al paciente con actitud positiva y diligente.

El Dr. Pedro Navarro continúo impartiendo sus conocimientos en la Cátedra de Medicina Tropical, actualizándose día a día en congresos en diversas partes del mundo, para continuar de esta manera su labor profesional de la Medicina, hasta el momento de su deceso 22 de diciembre de 2017.

Biografía elaborada por

Isabela Rivas, Cristina Rodríguez y Lilian Rodríguez

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